María Sorté, conocida como la “Sofía Loren de México,” ha sido una de las actrices más queridas de su país.

A sus 69 años, Sorté reflexiona sobre su vida, abordando temas de amor, independencia y resiliencia, además de los desafíos que ha enfrentado en su vida personal y profesional.

Sorté compartió una vida con Javier García Paniagua, un influyente político mexicano con quien tuvo dos hijos, Omar y Adrián. La muerte de Javier en 1998, en circunstancias dolorosas, dejó una marca profunda en su vida. A pesar de su apertura al amor tras la pérdida, Sorté no ha encontrado una nueva pareja, priorizando la independencia y el cariño de sus nietos.

Uno de los desafíos más significativos para María fue en 2020, cuando su hijo Omar García Harfuch, secretario de Seguridad de la Ciudad de México, sobrevivió a un atentado. A pesar de las preocupaciones, María se mantiene firme en su país y orgullosa de su hijo, confiando en la protección divina y manteniendo la esperanza.

María Sorté también ha hablado de sus raíces y de su vida de lucha desde la infancia. Nacida en Camargo, Chihuahua, perdió a su padre cuando tenía apenas cuatro años, enfrentando dificultades económicas junto a su madre.

Estos años de adversidad fortalecieron su carácter y la prepararon para los altibajos de su carrera en el entretenimiento. Su regreso a la pantalla la llena de gratitud y le brinda la oportunidad de inspirar a otras mujeres, demostrando que siempre es posible seguir adelante y encontrar fuerzas en medio de las pruebas de la vida.