Pedro Infante, una de las figuras más emblemáticas de la época de oro del cine mexicano, falleció trágicamente a los 39 años en un accidente aéreo el 15 de abril de 1957.

Su muerte dejó un vacío profundo en la cultura mexicana, pero también dio lugar a una serie de teorías de conspiración que han perdurado a lo largo del tiempo.

Nacido el 18 de noviembre de 1917 en Mazatlán, Sinaloa, Infante fue un talentoso cantante y actor que conquistó el corazón de millones. A lo largo de su carrera, protagonizó cerca de 60 películas y grabó alrededor de 350 canciones, convirtiéndose en un símbolo de la cultura mexicana. Su legado sigue vivo en el recuerdo de sus obras, desde “Nosotros los pobres” hasta “La calandria”.

La verdadera historia detrás de la trágica muerte de Pedro Infante - La  Jiribilla

Sin embargo, el trágico día de su muerte comenzó con un vuelo que tenía como destino la Ciudad de México. La avioneta, un C-87 Liberator Express, se estrelló a solo cinco minutos del despegue debido a un fallo en el motor, y su cuerpo fue irreconocible tras el accidente. Esta circunstancia avivó las llamas de rumores que aseguraban que Pedro Infante aún estaba vivo. Las teorías abarcaban desde su supuesta implicación con narcotraficantes hasta intrigas políticas, involucrando incluso a presidentes de México.

Uno de los rumores más impactantes provino de César Augusto Infante, quien se autodenominó nieto del artista. Afirmó que Pedro había mantenido un romance con la actriz Christian Martel, lo que habría llevado a una conspiración para simular su muerte y mantenerlo cautivo. Según estas teorías, las circunstancias de su muerte fueron manipuladas por figuras influyentes para proteger sus propios intereses.

Además, algunos sostienen que Pedro Infante había descubierto que su avioneta estaba siendo utilizada para el narcotráfico y que, al intentar desvincularse, se convirtió en un blanco. Se especula que fue asesinado o que su muerte fue cuidadosamente planificada. Estas narrativas se entrelazan con el dolor de su pérdida, creando un entramado de especulaciones que aún persiste.

La vida y muerte de Pedro Infante no solo marcan la historia del cine mexicano, sino que también reflejan cómo la figura de un ícono puede ser objeto de mitos y teorías en el imaginario colectivo. A pesar de las circunstancias trágicas de su partida, su legado perdura y su música sigue resonando en el corazón de los mexicanos, recordando siempre la esencia de un gran artista cuya vida fue un brillante ejemplo de pasión y talento.