El padre en el centro de esta familia de Hollywood alguna vez disfrutó de una exitosa carrera en la música y la actuación, pero su vida personal se convirtió eventualmente en objeto de escrutinio público. Sus dos hijos, que luego lograron su propio éxito, fueron criados en medio del glamuroso mundo de la fama. Sin embargo, debajo de la superficie, las tensiones estaban latentes, lo que finalmente llevó a un conflicto público.

La historia de la pareja comenzó en 1975 con un encuentro casual en un vuelo de Nueva York a Los Ángeles. La conexión fue instantánea en la cabina de primera clase. La separación marcó el inicio de un período turbulento para la familia. Inicialmente, su padre se mantuvo comprometido con sus hijos, pero la dinámica cambió drásticamente tras el divorcio, lo que provocó un aumento de la tensión. Él describió cómo su papel como padre se fue desvaneciendo con los años, atribuyendo gran parte de este cambio a su exesposa, quien creía que lo mantenía a distancia.

A medida que la estrella de su madre ascendía y su nueva relación con otro actor captaba la atención pública, los niños comenzaron a distanciarse de su padre biológico. Él también inició otra relación, lo que redujo aún más su participación en sus vidas.

Descorazonado, reaccionó públicamente ante lo que percibía como su rechazo. Amargamente declaró que si su hija deseaba llamar “papá” al compañero de su madre, debería dejar de usar su apellido. “Ahora les digo: ‘Los libero’. Tuve cinco hijos biológicos, pero ahora me considero padre de tres. Ya no los reconozco como propios”, afirmó. Su hija reconoció que los problemas familiares eran complejos, pero expresó algo de comprensión: “Lo perdono”, comentó, reconociendo el dolor que él debe sentir.

Recientemente, admitió que su relación era mínima, diciendo: “Realmente no tengo una, pero se está calentando”. Kate enfatizó su falta de amargura, añadiendo: “Solo quiero que él sea feliz”. Oliver, el hijo, también ha establecido una sólida carrera como actor y productor, conocido por su trabajo en programas como “Rules of Engagement” y “Scream Queens”, así como en películas como “Walk of Shame”.

A pesar de su éxito profesional, ambos han tenido que lidiar con las cicatrices emocionales de su relación fracturada con su padre. Sin embargo, hay señales de que su vínculo se está curando gradualmente tras años de dolor y disputas públicas. La familia está dando pasos tentativos hacia la reconciliación a través de pequeños gestos significativos.