Kavita Baluni demostró una creencia inquebrantable en la importancia de la familia desde temprana edad. Incluso antes de casarse, soñaba con brindar un hogar amoroso a un niño necesitado, un concepto que desafiaba las opiniones tradicionales dentro de su familia y cultura. Cuando ella y su esposo Himanshu decidieron formar una familia, la adopción fue su camino natural.

Su viaje tomó un giro inspirador cuando se encontraron con el Síndrome de Down durante su tiempo en Estados Unidos. Sin amilanarse, buscaron activamente comprenderlo y aceptarlo. Este nuevo conocimiento alimentó su deseo de proporcionar un entorno de crianza para un niño con necesidades especiales. Creían firmemente que cada niño, independientemente de su capacidad, merecía una oportunidad en una familia amorosa. Inicialmente, sus familias expresaron preocupaciones sobre los desafíos y consideraciones futuras de adoptar a un niño con necesidades especiales. Sin embargo, Kavita y Himanshu permanecieron firmes en su convicción. Se embarcaron en un viaje transformador para adoptar a una niña con Síndrome de Down.

Veda, una niña de 15 meses con Síndrome de Down, capturó sus corazones a través de fotografías. Sin lugar a dudas, sabían que estaba destinada a ser su hija. A pesar de ser la primera pareja india en adoptar a una niña con Síndrome de Down, recibieron a Veda con los brazos abiertos. “Nadie más la quería”, compartió Kavita.

El período inicial presentó una serie de ajustes, incluidas visitas médicas, terapias y modificaciones en su hogar para adaptarse a las necesidades de Veda. Veda enfrentaba desafíos visuales como nistagmo, estrabismo y miopía. Para mejorar su vista y coordinación visual, usa anteojos y se somete regularmente a parches oculares. Además, lucha con la hipotonía, una condición que debilita progresivamente el tono muscular. Poco después de llegar a casa, comenzó las sesiones de fisioterapia.

El espíritu inquebrantable y la fuerza de Veda brillaron en cada desafío. Su transformación de una frágil niña de 15 meses a una niña de 6 años próspera e independiente es extraordinaria. Hoy, puede columpiarse, equilibrarse y participar en actividades que alguna vez parecían fuera de su alcance. Su capacidad para comunicarse verbalmente y su confianza en el agua demuestran su notable determinación y resiliencia. Kavita y Himanshu valoran cada momento con Veda, fomentando su curiosidad y habilidades a través del juego, la exploración y, recientemente, la educación en el hogar: un enfoque personalizado que se adapta a sus fortalezas e intereses únicos.

Veda se ha convertido en su maestra, impartiendo valiosas lecciones sobre aceptación, amor incondicional y la belleza de abrazar las diferencias. Les ha mostrado que ser diferente no es una limitación, sino más bien una fortaleza única que debe ser celebrada. A través de este viaje, Kavita y Himanshu han aprendido a apreciar cada momento, abrazando las alegrías y desafíos de la vida con gracia y gratitud.