Alejandra Guzmán, nacida en 1968 en Ciudad de México, se crio en un ambiente de celebridades, siendo hija de dos figuras públicas mexicanas: la reconocida actriz Silvia Pinal y el cantante Enrique Guzmán.

Desde muy joven, Alejandra estuvo rodeada de fama y un ambiente artístico, lo que parecía señalar su futuro en el espectáculo. Sin embargo, detrás de esta fachada familiar de éxito y glamour, enfrentó una vida marcada por el dolor y la tragedia.

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La relación de sus padres, que en público parecía perfecta, estaba plagada de conflictos. Enrique Guzmán era violento con Silvia, lo que impactó profundamente en Alejandra y su hermano.

La pequeña buscó refugio en el ballet, pero las constantes ausencias de su madre, quien viajaba frecuentemente por trabajo, dejaban a Alejandra en un ambiente de soledad y resentimiento.

A los 14 años, intentó unirse a un grupo musical llamado Fresas con Crema, pero su madre le impidió hacerlo. Esta negativa avivó su deseo de independencia y la llevó a desafiar las expectativas maternas.

A medida que Alejandra crecía, buscó su propio camino en la música. Luego de la pérdida de su media hermana en un trágico accidente, su vida dio un giro doloroso que la dejó devastada y profundizó su necesidad de expresión artística.

Su madre continuó con su carrera y giras, dejándola sola en momentos difíciles. Esto la llevó a refugiarse en la música y, lamentablemente, en sustancias para mitigar el dolor. Al cumplir 17 años, logró unirse finalmente a Fresas con Crema, lo que marcó el inicio de su carrera.

Tras la disolución del grupo en los años 80, Alejandra tuvo la oportunidad de colaborar con Kenny y Los Eléctricos, una popular banda de rock. Aunque esta experiencia fue breve, le sirvió para ganar visibilidad y desarrollar su estilo único.

Posteriormente, fue descubierta por un productor que la ayudó a lanzar su carrera en solitario. Su primera canción, “Bye Mamá”, fue una expresión de sus sentimientos de abandono y dolor, dedicados a su madre.

En 1988, Alejandra debutó como solista, y desde entonces, ha construido una carrera exitosa, reconocida por su estilo rebelde y auténtico en la música.