La influencer más famosa del mundo dio sus primeros pasos al lado de una famosa y controversial heredera.

Ser millonario y poderoso no siempre es sinónimo de fama y eso Paris Hilton y Kim Kardashian lo tuvieron siempre muy claro.

Tanto la heredera de los hoteles Hilton, como la hija del abogado de las estrellas, se movían en los círculos más exclusivos de Estados Unidos y eso las unió en una gran amistad desde muy pequeñas. Sin embargo, no era suficiente para ninguna de las dos, ellas querían ser conocidas en el mundo entero.

Kim Kardashian comenzó su carrera siendo asistente de Paris hilton.

La primera que tuvo su oportunidad fue París Hilton gracias al reality show que protagonizaba junto a su amiga Nicole Richie hija del reconocido músico Lionel Ritchie, The Simple Life.

El éxito rotundo del programa convirtió a la rubia en una celebridad instantánea. Los paparazzis la perseguían a donde fuera que iba, comenzando así a cumplir el sueño de su vida.

En aquel entonces Kim Kardashian no era el personaje público que hoy conocemos, pero ya estaba enfocada en convertirse en uno, por eso su amiga Hilton la contestó como si asistente personal, de esa manera estarían siempre juntas, ella ganaría un sueldo y aparecería en todos los programas donde la joven heredera estuviera.

Esto comenzó una relación que poco a poco, quedaría demasiado chica para la socialite. Como asistente, la influencer debería acompañarla a todos lados, cargar sus bolsas de compras o cualquier cosa que París Hilton quisiera llevar consigo todo el tiempo y hablar con la gente con la que la rubia no quisiera lidiar.

Sin embargo, no duró mucho. Más pronto que tarde, Kim Kardashian terminó renunciando a su puesto para enfocarse en su ambición y la relación no terminó de la mejor manera. La exmujer de Kanye West sentía que estaba para más que ser la simple sombra de París Hilton.

El tiempo le dio la razón, la morocha logró posicionarse, ella y toda su familia como las personas más famosas a nivel mundial. Por suerte, con el tiempo las celebrities dejaron de lado sus diferencias y retomaron su amistad, aunque sin verse tanto. “Me dio una carrera y lo reconozco totalmente”, confesó la influencer en un episodio de su reality show Keeping up with the Kardashian.

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